Nacido en Barcelona en 1837, Pedro Armengol (en catalán, Pere Armengol i Cornet), terminó sus estudios en derecho en la Universidad de Barcelona en 1858, doctorándose en derecho civil y canónico en 1866. En 1861 ingresó en la Audiencia de Barcelona, logrando el cargo de relator en 1881 y de magistrado en 1886.

Aunque no tan conocido como otros de sus coetáneos, Pedro Armengol fue un destacado impulsor de la reforma penitenciaria, distinguido por ser el fundador de la Asociación General para la Reforma Penitenciaria en España el 14 de mayo de 1879. Propugnaba reformas urgentes y necesarias en el régimen de las cárceles y presidios, en los requisitos exigibles al personal de vigilancia o en el Código Penal, todo ello para lograr la enmienda del delincuente como finalidad esencial del sistema penitenciario (correccionalismo).

Pedro Armengol realizó una intensa labor divulgativa de la reforma penitenciaria en libros, folletos, artículos en revistas, conferencias y discursos, participó en varios congresos internacionales, impulsó la creación del Asilo Toribio Durán, promovió la edificación de la prisión celular de Barcelona (cárcel modelo) y fue presidente y ponente de la comisión que redactó las bases relativas a la organización del personal administrativo de las cárceles y presidios de España.

Entre sus principales publicaciones en el ámbito penitenciario, destacan La Cárcel Modelo de Madrid y la ciencia penitenciaria (1876), Bases para el establecimiento de colonias penitenciarias (1877), A las Islas Marianas o al Golfo de Guinea (1878), Necesidad de la reforma penitenciaria en España (1880), La escuela de reforma para jóvenes viciosos, vagabundos o abandonados (1885)o La nueva cárcel de Barcelona (1888), entre otras; así como los dictámenes e informes de los congresos penitenciarios a los que asistió (Estocolmo, 1878, Roma, 1888 o San Petersburgo, 1892).

En cuanto a sus propuestas, Pedro Armengol se alineó con la pléyade de reformistas penitenciarios del último tercio del siglo XIX (como Concepción Arenal), manifestándose partidario: del sistema de Auburn (y en contra del sistema celular de aislamiento absoluto), del trabajo como elemento regenerador, de la creación de colonias penitenciarias en las que realizar trabajos agrícolas, de la formación y profesionalización del personal penitenciario, de la creación de asilos especiales de carácter transitorio para los libertados (patronatos de presos o libertos), del traslado de la Dirección de establecimientos penales al Ministerio de Gracia y Justicia y, en fin, de la ideología correccionalista con el fin de reforma del delincuente.

Para saber más:

• ALBÓ I MARTÍ, Ramon, Armengol y Cornet en la ciencia penitenciaria discurso leído en la sesión que celebró la Asociación General para la Reforma Penitenciaria en España el día 14 de noviembre de 1897, Ateneu Barcelonès, Barcelona, 1898. Accesible online.  
  

• BONET I ARMENGOL, Francesc, Pere Armengol i Cornet, penitenciarista català, Departament de Justícia Català, 1994.